Sunday, March 3, 2024

ESTRATEGIAS DE INTERVENCIÓN PARA LA DISLEXIA

 

Imagen de Shutterstock

Según la Federación Plataforma Dislexia, el trastrosno del aprendizaje de la lectura, también llamado dislexia, afecta a un 10% de la población en España, entre los que 800.000 son niños en edad escolar. De ellos, solo el 33% reciben la atención profesional necesaria. 

Conocer las características de este trastorno, nos ayudará a seleccionar y aplicar las estrategias adecuadas que respondan de manera eficaz a las necesidades de estos alumnos.

Sus características principales son:

Ø Independencia de las habilidades lectoras de otras habilidades cognitivas: en el caso de la dislexia, el mantenimiento de habilidades tales como memoria, atención, lenguaje oral o incluso un buen nivel de inteligencia, frente a la baja capacidad de habilidades lectoras, estaría reflejando la independencia de los sistemas neuronales relacionados con cada uno de estos aspectos. Es decir, un sistema se encuentra alterado mientras otros se mantienen preservados.

Ø Alteración en el neurodesarrollo: el término “alteración” en el neurodesarrollo está relacionado con una organización estructural y/o funcional anómala de la región cerebral o sistema neural implicado en la consecución de la habilidad lectora, lo que provoca dificultades en el aprendizaje lector.

Ø Persistencia de las dificultades a lo largo del tiempo: los niños que presentan dislexia carecen de las suficientes capacidades para conseguir una correcta adquisición del proceso lector como consecuencia de una alteración en el neurodesarrollo y, además, ésta dificultad se mantiene a lo largo del tiempo. Sin embargo, estas dificultades no se manifiestan siempre de la misma manera y van evolucionando a lo largo del tiempo. El conocimiento de esta evolución es importante ya que por el hecho de presentar un niño dislexia no implica necesariamente, que vaya a ser incapaz de superar estudios de grado medio o superior, ni que todos vayan a tener la misma evolución. 

Ø No todos los niños dislexia presentan las mismas alteraciones: la dislexia es una entidad heterogénea. Se estima que el 87% de las personas con diagnóstico de dislexia, presentan un problema de tipo fonológico y algunos de éstos presentan además otra sintomatología de tipo no fonológico, como déficit de atención, dispraxia, ansiedad, entre otros ejemplos.

Veamos a continuación algunas estrategias metodológicas que podemos utilizar con estos alumnos:

ADAPTACIONES METODOLÓGICAS

Este tipo de adaptaciones permite proporcionar una atención individualizada en clase cuando el alumno accede al aprendizaje de manera distinta que el resto de sus compañeros. Estas adaptaciones podrían consistir en:

Ø Simplifica las instrucciones escritas: los niños con dislexia pueden encontrarse agobiados ante textos que contienen muchas unidades de información. Sería conveniente subrayar o destacar las partes más importantes del texto, o resumirlas en frases más sencillas.

Ø Fracciona los textos y las actividades en partes más pequeñas: con el fin de evitar elevados niveles de ansiedad y desmotivación ante la cantidad de trabajo que el alumno debe realizar, sería conveniente fraccionar la actividad en pequeños pasos o los textos largos en trozos más pequeños, así como eliminar partes del mismo cuando proporciona información redundante. 

Ø Utiliza un cronómetro en la realización de las tareas escolares.  En ocasiones algunos alumnos con dislexia muestran dificultades en el área espacio-tiempo, por lo que les he difícil comprender el tiempo que tienen para realizar una determinada tarea. Por este motivo, cuando le decimos por ejemplo que le quedan 10 minutos para acabar el examen, el alumno percibirá este aviso con angustia y estos nervios se traducirán en errores. Por ello, el uso de un cronómetro que mida el tiempo destinado a la realización de cada tarea o subtarea le permitirá al alumno con dislexia entender de forma concreta el tiempo del que dispone sin producirle ansiedad.

Ø Planifica descansos cortos frecuentes durante las actividades. El alumno con dislexia ha de realizar un sobreesfuerzo en las tareas que conlleva lectura y escritura, así como organización y análisis de la información. Por este motivo la división de tareas largas en sucesivas tareas cortas y la planificación de descansos cortos entre dichas tareas cortas, son estrategias muy beneficiales para estos alumnos.

Ø Utiliza las instrucciones paso a paso. La nueva información se puede presentar en pasos secuenciales pequeños y asegúrate de que ha entendido cada paso antes de pasar al posterior.

Ø Marca con fluorescente la información más relevante y esencial en el libro del alumno. Utiliza organizadores de colores para organizar la información del libro, libreta, archivador, etc.

Ø Proporciónale organizadores gráficos: la utilización de esquemas, mapas conceptuales u otro tipo de organizador gráfico, resultará efectiva para que el alumno pueda seguir el desarrollo de los temas teniendo un soporte lector simplificado, que posteriormente le facilite el recuerdo de la información que el profesor ha dado. Además, le ayudará a entender la idea principal y los aspectos relacionados con ella, a la vez que le ayudará a tener imágenes visuales de las palabras clave del texto.

Ø Grabadora: la grabadora puede resultar una ayuda eficaz para que el niño pueda disponer de la explicación del profesor en casa cuando realice los deberes o estudie para un examen. También es un buen recurso para identificar su progreso cuando lee.

Ø En educación física utiliza cartulinas de colores sobre las paredes de la sala para favorecer la localización de la derecha, la izquierda, delante y detrás, así como el movimiento, orientación y desplazamientos por la sala. También se puede utilizar un objeto como una cinta atada en la muñeca derecha para favorecer igualmente la lateralidad respecto al propio cuerpo.

Ø Realiza seguimiento continuo y personalizado del proceso educativo y desarrollo personal de alumno, ofreciéndole refuerzo y apoyo continuado, haciéndole consciente de sus progresos por pequeños que sean.

Ø Utiliza estrategias nemotécnicas. Resultan eficaces para ayudar a los alumnos a recordar información clave o los pasos que han de seguir para realizar una tarea.

Ø Desarrolla la conciencia fonológica del alumno a través de actividades que supongan la descomposición y composición de las palabras, como descomponer una palabra en golpes de sonido (sílabas), cambiar una letra de la palabra para ver cómo se modifica, formar palabras nuevas, a partir del último golpe de sonido (sílaba), comparación auditiva de palabras similares o iguales, entre otros ejemplos. Estas actividades se habrán de trabajar primero a través de la ruta fonológica del proceso lector (auditiva) y seguidamente repetirlas a través de la ruta ortográfica (visual).

Ø Dedica un tiempo diario en el aula a la lectura. Usa el diccionario de sinónimos y antónimos para la búsqueda del significado de las palabras que el niño no entiende en el texto y confecciona un glosario de palabras. El objetivo es que el alumno vaya ampliando progresivamente su memoria ortográfica (cantidad de imágenes de las palabras escritas almacenadas en la memoria). Permite que use este glosario de palabras mientras realiza sus tareas escolares.

Ø Dale información verbal y visual simultáneamente. Introduce los temas (siempre que sea posible) por medio de imágenes. El uso de DVD, vídeos, diapositivas, murales, etc., le sirven como complemento de la explicación oral y les ayuda a la comprensión de conceptos abstractos.

Ø Apoyar con gráficos o imágenes el material escrito.

Ø Escribe los apartados y el vocabulario más significativo del tema en la pizarra. Antes de una explicación puedes escribir las nuevas palabras de vocabulario y los aspectos principales en la pizarra, organizados en un mapa conceptual, esquema u otro tipo de organizador gráfico.

Ø Permítele el uso de apoyos materiales. Facilita el uso de recursos didácticos tales como ábacos, abecedario, calculadora (una vez que tienen adquiridas las operaciones), tablas de multiplicar, etc.



No comments:

Post a Comment